'El partido austero'
Aún recuerdo cuando un emergente líder de la izquierda (creo que fue Pablo Iglesias) proclamaba la austeridad como marchamo de una dedicación política honesta… Decía que los políticos en las instituciones no deberían percibir por ello más de tres veces el salario mínimo interprofesional…
En la actualidad aquella reivindicación de la extrema izquierda ha quedado obsoleta, olvidada, ante una realidad en la que cientos de miles de cargos públicos multiplican esa ilusoria y generosa aspiración inicial, adjudicándose a miles de concejales de pequeñas y grandes poblaciones en las cuales ellos mismos se ven obligados a ”actualizar” sus emolumentos…
Naturalmente, el astronómico “Gasto Corriente” de los miles de entes públicos, organismos, asesorías, opacos ONGs, etc., están amparados por esa legalidad…autoconcedida, pero no son esas retribuciones escandalosas lo que escandalizan a la ciudadanía ( tal vez porque piensan como habría dicho Ortega y Gasset, que tal vez el próximo sea ”uno de los nuestros”)…Lo que escandaliza a la población es que algunos de esos ”bien-pagados”, además, han percibido enormes “mordidas” en comisiones ilegales, vinculadas a las adjudicaciones de grandes obras públicas; a sus gestiones institucionales… Cifras casi inimaginables, de cientos de miles de euros están siendo descubiertas (¡Ah, la Guardia Civil..!)
Ante el título de este escrito hay que presumir que todos los partidos políticos desean lo mejor para los españoles, cada uno según sus creencias y propósitos, tanto de la extrema izquierda como de la extrema derecha.., pasando por todos los intermedios… Pero la naturaleza humana y sus debilidades pueden afectar a unos y a otros…
Repaso los programas de los partidos y no encuentro un verdadero propósito de austeridad ,de ese propósito reclamado por muchos…
Sería absolutamente ingenuo reclamar que un partido político exigiera la “gratuidad y obligatoriedad” de los cargos de concejal, como existía “antes” para los cargos representativos, no ejecutivos…Seria suficiente adherirnos a a la lejana propuesta de Pablo Iglesias.
Ese sugestivo y oculto “Partido Austero” (que podía ser asumido por cualquiera de los existentes) acabaría con los miles de coches oficiales, reduciría a la mitad los ministerios innecesarios existentes, y el escandaloso número de asesores de los ministros, alcaldes, presidentes… El Partido Austero recuperaría todas las competencias que le atribuye la Constitución y que han sido delegadas en las Comunidades Autónomas, cuyas policías propias no tendrán competencias en áreas de interés nacional. El Partido único solo sufragaría las embajadas y representaciones de España.
El Partido Austero acatará las leyes -naturalmente- pero defenderá la vida desde la concepción hasta la muerte natural y no pagará los gastos ocasionados por la aplicación de la Ley de I.V.E ni de la eutanasia.
Etc., etc… Partido Austero… ¿Dónde estás?